El trineo de Santa - La Aldea de Santa - PNP

Hay muchas formas de desplazarse por la aldea de Santa: motonieves, trineos tirados por perros o renos, y hasta el tren de la aldea, pero el medio más importante es el trineo de Santa. Santa es el único que conduce el trineo y, básicamente, solo durante la noche más importante del año: la Gran entrega de regalos.

Es el vehículo más grande de la aldea de Santa y es posible reconocerlo fácilmente por su vibrante color rojo, sus rieles dorados y el cómodo asiento desde donde Santa conduce.

El trineo de Santa es más antiguo que el mismísimo tiempo, y los Kapunki y los invengenieros son los encargados de cuidarlo. Todos los años, realizan algunos pequeños ajustes y mejoras. Algunos años, los invengenieros diseñan unos artilugios nuevos excepcionales. ¡Los duendes más jóvenes no reconocerían el trineo si lo hubieran visto cien años atrás!

Quizás, la pieza más fascinante del trineo es el compartimiento mágico para regalos que tiene en el baúl. El baúl puede aparentar tener un tamaño normal, pero en realidad alberga un espacio infinito para cada uno de los regalos que Santa tiene que entregar. ¡Cuantos más obsequios carguen los duendes, más grande será el espacio! Este invento mágico es uno de los que más enorgullece a Ajatus, la jefa invengeniera. Fue ella quien logró obtener la fórmula mágica para que todo funcione.

Los invengenieros ponen a tono el trineo y le dan una nueva capa de pintura roja cada año, además de realizar algunos otros ajustes. Una vez que el equipo da el visto bueno, el trineo de Santa se estaciona en el garaje del taller de juguetes. ¡Pronto estará repleto de regalos para repartir!

Una vez que se cargan los últimos obsequios en el baúl, y que los artedores comprueban que están todos una y otra vez, el trineo es transportado hacia la pista de despegue con el tren local. En ese momento de la Nochebuena, los duendes Holhooja amarran a los 9 renos elegidos del equipo de Santa al trineo. Santa hace las últimas comprobaciones en el asiento de conducción y... ¡todo está listo para partir!

El tablero del trineo tiene toda clase de dispositivos rastreadores para ayudar a Santa una vez que esté en el aire, y una línea directa de comunicación con los invengenieros, que saben cómo operar la máquina del gran péndulo, que ralentiza o detiene el tiempo. A pesar de toda esta tecnología, Santa se guía mayormente por la estrella polar en su recorrido durante la Nochebuena. Hace tanto tiempo que entrega regalos que no necesita ayuda extra en su tablero. ¡Sabe exactamente cómo encontrar a los niños de la lista de buenos!