El organizacartas - La Aldea de Santa - PNP

Todos los años, los niños del mundo entero le escriben cartas a Santa Claus para contarle sobre sus buenas acciones y lo que les gustaría recibir como regalo de Navidad. Como hay tantos niños, la cantidad de cartas que llegan a la oficina de correos del Polo Norte es enorme.

Los duendes correristas son responsables de recibir, leer y ordenar las cartas. Los detalles de las cartas se agregan al gran libro de cada niño, para que Santa tenga todo lo que necesita al leerlo. ¡Gracias a estos datos y a los informes de los duendes bienhechores, Santa lo sabe todo de ti!

Los duendes adoran este trabajo, ya que es hermoso leer todo lo que los niños tienen para compartir, sus deseos y sueños. Pero con tamaña cantidad de cartas que llegan a la aldea de Santa todos los días, es muy difícil mantener un control de cada una de ellas.

Cada año, los niños de todo el mundo envían millones y millones de cartas a Santa Claus y con el agregado actual de los correos electrónicos y los mensajes por redes sociales, los duendes correristas estaban comenzando a tener problemas para gestionarlo todo.

¡Así es como nació el organizacartas! Sanoma, el jefe correrista, trabajó con la jefa invengeniera, Ajatus, y el resto de su equipo para construir una máquina mágica que sirviera para organizar toda la correspondencia y los paquetes que llegan para Santa. Es la combinación perfecta de magia y tecnología de los duendes, que ayudará a aliviar un poco la carga de la oficina de correos del Polo Norte.

El organizacartas ocupa una pared completa en la oficina de correos, para que varios duendes correristas puedan usarlo al mismo tiempo. No tiene botones ni nada que se le parezca, solo unas cuantas pantallas por encima de los escáneres. Cuando un correrista recibe la carta de un niño o niña, debe colocarla en uno de los escáneres del organizacartas y, con un chirrido, todo lo que está escrito en el papel se copiará mágicamente en la página correspondiente del gran libro de ese niño o niña. La pantalla que está conectada al escáner mostrará todo lo que hay en el interior de la carta, para que el duende correrista que la escaneó también pueda leerla.

Esto es posible gracias a los tantos tubos cargados de polvo estelar que los invengenieros construyeron bajo la nieve, que conectan la oficina de correos con la biblioteca de Santa. Allí es donde están todos los grandes libros de los niños del mundo.

De esta forma, los correristas no tienen que desplazarse entre la oficina de correos y la biblioteca, y los grandes libros no tienen que salir de su lugar. ¡Esta es la mejor forma de que no se pierda ninguna carta y de que todos los deseos de los niños lleguen a Santa!